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lunes, 19 de marzo de 2012

cruz negra


Según explicó el juez Rolando Vomero, los dos enfermeros mataban a sus pacientes aplicando morfina y aire por vía central. Reconocieron 16 muertes, pero la cifra podría ser mucho mayor. La abogada Inés Massiotti, representante de uno de los procesados, aseguró que su cliente es una persona abusada sexualmente que "actuó por piedad".El juez Rolando Vomero procesó a tres personas por el caso de los "Ángeles de la Muerte", dos por homicidio y una por encubrimiento de homicidio.

El juez penal Rolando Vomero resolvió el procesamiento con prisión -lo que implica que ahora comienza el proceso penal que culmina con una sentencia- de los dos enfermeros de 39 y 46 años por "homicidio especialmente agravado en régimen de reiteración real" y de una enfermera por "complicidad en un delito de homicidio especialmente agravado".
"Las dos personas admitieron (...) que a muchas personas les habían suministrado medicación para que fallecieran", dijo Vomero a periodistas. De todas formas, adelantó que "la investigación continuará".
Vomero explicó que "la metodología en un caso era aplicarles morfina directamente en vía central y en otro caso al parecer era aire en vía central, lo cual le ocasionaba la muerte en pocos minutos".
Si bien los acusados indicaron que actuaron "porque no querían ver sufrir a la gente", sus víctimas no eran pacientes terminales, dijo Vomero.

La abogada Inés Massiotti, representante legal de uno de los enfermeros involucrados en el caso "Ángeles" fue la encargada de desvelar el contenido principal de la sentencia judicial, realizando declaraciones a la prensa frente a la sede judicial de la calle Bartolomé Mitre, donde el juez Rolando Vomero juzgara el caso. La profesional explicó que su defendido, ahora procesado por homicidio, es un enfermero que trabaja en la Asociación Española y "un amigo de toda la vida, que dedicó más de 20 años a la Salud". Asimismo, antes de su declaración, aclaró que se encontraba medicada debido a la tensión del caso.
"Mi cliente fue procesado por una serie de delitos de homicidio", dijo Massiotti, agregando que el reo confesó haber cometido varios crímenes, alegando que "actuó por piedad".
"Después de 20 años de CTI, con estrés y entre la vida y la muerte, no pudo soportarlo más", añadió la abogada acerca de su defendido. "Creo que en él hay una patología psicológica, aunque no psiquiátrica", ya que el trabajador de la salud "fue periciado exhaustiva y correctamente" en tribunales. Además, refirió que su cliente "es una persona abusada sexualmente".

Posteriormente, ante la sede del mencionado juzgado, el juez Vomero se expresó en similares términos a los empleados por Massiotti, explicando que las muertes solían producirse mediante sobredosis de sedantes o por inoculación de aire en el torrente sanguíneo.
El magistrado informó que las investigaciones se iniciaron a raíz de la denuncia de un funcionario del Hospital Maciel, quien entró en sospechas "de que estaban aplicando algo para que la gente falleciera". Vomero manifestó que "se continuará con el auto de procesamiento" y confirmó que las víctimas, no eran por regla pacientes terminales, "independientemente de que alguno sí lo fuera".

Los dos enfermeros remitidos a prisión son responsables de quitar la vida a decenas de pacientes en el mencionado hospital público, así como en la Asociación Española. Uno de ellos marchó a presidio por cinco casos de homicidio especialmente agravado y en reiteración real, mientras que el segundo fue encontrado culpable de once casos del mismo delito. Curiosamente, la relación entre ambos delincuentes se limitaría al tipo de crimen que cometían, y al hecho de que ambos fueron descubiertos en el marco de las mismas investigaciones, ya que actuaban de forma independiente y apenas se conocían.
En cuanto a la mujer procesada por encubrimiento, es también profesional de la salud y pareja de uno de los homicidas.

Por otra parte, las "razones humanitarias" alegadas por los enfermeros no se corresponderían con la naturaleza de los crímenes que se les achacan, ya que en muchos casos se trataba de pacientes que se encontraban en franca recuperación.

Si bien hasta el momento se ha demostrado la culpabilidad de uno u otro enfermero en dieciséis muertes, el número de casos podría aumentar significativamente. Durante las indagatorias, uno de los ahora procesados sugirió que podría haber quitado la vida hasta a cincuenta pacientes, mientras que el segundo dijo no recordar a cuántos ultimó. Fuentes policiales estiman que la cifra de víctimas de ambos "Ángeles" podría ser de hasta dos centenares.
Labor Ministerial
"El ministro de Salud Pública, Dr. Jorge Venegas y los integrantes del Gabinete Ministerial, se encuentran trabajando en sesión permanente" con el objetivo de tomar el más amplio conocimiento sobre todos los detalles del caso que afecta a dos instituciones de salud", indica un comunicado de Salud Pública al respecto del caso de los enfermeros detenidos.
"A estos efectos, la cartera resolvió en primer término, convocar a la Comisión de Seguridad del Paciente, que sesionará esta jornada. Por otra parte, se están llevando adelante en el día de la fecha inspecciones en los servicios afectados, de modo de recabar más datos que colaboren con la investigación policial y judicial", aclara la cartera.
"Desde el MSP se continúa con un accionar proactivo contribuyendo con labor policial y judicial, y se aguardan las resoluciones judiciales sobre el caso. El ministro y todas las autoridades de Salud Pública expresan la más honda preocupación sobre el tema, sobre el que además, y dentro de sus competencias, se están ocupando en forma permanente desde el momento en que la información fue comunicada por las autoridades del Ministerio del Interior y del Poder Judicial. El Gabinete se mantendrá reunido y expectante ante los requerimientos de este tema", concluye la comunicación.

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