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La Dirección General de Lucha contra el Crimen Organizado de la Policía fue la que descubrió el accionar de los enfermeros, en base a dos denuncias anónimas del Maciel. Su responsable, Ángel Rosas, aseguró que aunque los trabajadores fueron procesados por 16 homicidios, ambos admitieron varios casos más.

La trama que culminó dejando al descubierto la operativa de estos dos enfermeros, que trabajaban en el Maciel y La Española, fue revelada por la Dirección General de Lucha contra el Crimen Organizado.

Su responsable, el comisario Ángel Rosas, explicó a Informativo Sarandí que la investigación comenzó tras recibir una denuncia anónima. "Recibimos información de una fuente anónima de la Salud en que decía que se estarían sucediendo muertes en CTI de distintos hospitales, aunque identificaba sólo uno de los lugares en donde se produjeron los hechos", explicó. Luego llegó una segunda denuncia que ya puso sobre la pista a los investigadores

"Se empezó a trabajar con seguimientos, vigilancias. Se hicieron diligencias e investigaciones primarias hasta confirmar que había dos personas que podían estar vinculadas a estos hechos", agregó.

Los investigadores percibieron que al menos 11 personas habían muerto en el Maciel en los últimos meses del 2011. Al estudiar la lista de trabajadores, comprobaron que uno de ellos desempeñaba funciones también en La Española, donde también se habían producido varios fallecimientos en el CTI.

Rosas también aseguró que por las declaraciones de los mismos implicados la cifra de homicidios podría ser mucho mayor, pese a haber sido procesados por 16 muertes. "Puede pasar que no lograran reconocer a sus pacientes mediante las fotos que les mostraban en el Juzgado, pero no quiere decir que no admitieran más casos", señaló.

Rosas dijo que hubo actitudes sospechosas de los dos enfermeros. "En algo llamaron la atención porque hubo fuentes anónimas", dijo, agregando que la enfermera procesada por encubrimiento tenía aparentemente conocimiento de la actividad de los dos funcionarios.

"No se pudo comprobar que hasta el momento estuvieran vinculados", señaló Rosas, que descartó además que su dependencia esté trabajando en una posible hipótesis de tráfico de órganos.

Según declaró a La República una fuente allegada a la investigación, una hipodérmica con vestigios de sangre, hallada en una sala del Hospital Maciel donde murió una paciente, fue la pieza clave que condujo a las detenciones de los dos enfermeros.