Los líderes de la oposición reclamaron al gobierno que cumpla con la promesa electoral de rebajar dos puntos de IVA aunque algunos dirigentes estuvieron de acuerdo con beneficiar a los sectores carenciados. El equipo económico será citado al Parlamento.“En lugar de bajar dos puntos de IVA, quieren subsidiar compras. Está bien, pero no se cumple con lo que se prometió. Dos puntos de IVA, son dos puntos de IVA para todo el mundo, no para Fulano o para Mengano", manifestó el senador Luis Alberto Lacalle a Ultimas Noticias. El líder de Unidad Nacional (UNA) reclamó al Frente Amplio (FA) que cumpla con el compromiso asumido y rebaje el tributo, aunque argumentó que hubiera preferido que la renuncia fiscal de 260 millones de dólares anuales se hubiera aplicado para elevar el mínimo no imponible del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (Irpf).
En declaraciones a Radio Sarandí, sostuvo que "en tren de rebajar, que se rebaje el costo de producción, el costo de combustible y de la energía, porque el país está quedando totalmente fuera de competencia". Además cuestionó al gobierno por "gastarse en cargos de confianza" lo que les "sobraba" en el momento de elaborar el Presupuesto.
En la misma línea, el senador Jorge Larrañaga manifestó que "el gobierno debe cumplir su promesa. Tenemos un IVA excesivo. Es el impuesto que siempre castiga a los más pobres, porque de alguna manera los que tienen más recursos lo pueden eludir. Las promesas deben cumplirse". El líder de Alianza Nacional (AN) tomó distancia de las posturas planteadas por otros dirigentes, como el economista Javier de Haedo, quien consideró positiva la idea planteada ayer en el diario El País por el presidente José Mujica de concentrar la rebaja en las tarjetas que el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) otorga a los sectores más carenciados.
De Haedo argumentó que "el hecho de que haya habido un compromiso preelectoral no tiene que ser una cosa que ate de manos", una postura distante de la sostenida por los líderes nacionalistas. El secretario general del Partido Colorado, Pedro Bordaberry, tampoco aceptó el planteo de limitar los cambios a los beneficiarios del Mides y apuntó que "toda rebaja es buena pero debe reflejarse en la educación, la salud y la seguridad". Luego de recordar que los colorados se consideran a sí mismos "el escudo de los débiles", afirmó que cualquier rebaja tributaria debe "venir acompañada por una mayor eficiencia en los recursos que el Estado destina a la gente que tiene menos y no en un gasto, como hay hoy, en más funcionarios públicos o más cargos".
En medio de las exigencias para que el gobierno cumpla lo prometido, la Comisión de Hacienda de la Cámara Baja resolvió convocar al equipo económico para que explique sus planes en materia tributaria. El diputado Jorge Gandini (AN), quien impulsó el llamado, cuestionó que la sociedad permanezca como "testigo de un debate que tiene como protagonistas a las figuras del gobierno pero en el que no podemos participar".
Su intención es consultar al equipo económico sobre el alcance de la renuncia fiscal y las medidas que se proyectan. Destacó que las dos opciones posibles son la rebaja general del IVA o la aplicación focalizada del ahorro para que llegue a los más carenciados. Desde su punto de vista, esa última opción resulta viable "siempre que haya instrumentos para aplicarla".
Más allá de la posibilidad de utilizar las tarjetas del Mides como instrumento, Gandini propondrá al ministro de Economía, Fernando Lorenzo, que analice la posibilidad de eliminar el IVA a la factura de UTE cuando el consumo sea menor a 2.000 pesos mensuales. "Las familias que gastan menos que eso seguramente no tienen calefacción central ni aire acondicionado porque eso los obligaría a consumir más. Eso nos permitiría hacer un aporte directo a familias humildes y contribuir a su economía", manifestó el legislador.
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