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lunes, 26 de noviembre de 2012

sigue solo


Peñarol le ganó a Wanderers 2-1 en el Estadio Centenario, por la fecha 13 del Torneo Apertura. Empezó perdiendo por anotación de Sebastián Gagnebín a los 60 minutos, pero en tres lo dio vuelta con un cabezazo de Dario Rodríguez a los 65' y tanto del Lolo Estoyanoff a los 68'. Con ventaja de cuatro puntos, puede liquidar el campeonato el próximo fin de semana.
Dos minutos de juego habían pasado cuando Peñarol hizo su primer aviso: Juan Manuel Olivera cabeceó el centro de Carlos Grosmüller, y controló el arquero. Después de esa llegada le costó al carbonero entrar al área porque la defensa bohemia se cerró, y la siguiente emoción del partido la puso Wanderers: Richard Mercado sacó un cabezazo fulminante y salvó Bologna.
El Beto volvió a salvar al Manya, porque Sebastián Gagnebín remató mal al arco pero igualmente la defensa no logró contenerlo y tuvo que tirarse el guardameta aurinegro con la mano estirada para evitar la conversión.
Peñarol era dominado en los primeros 20 minutos, porque su mediocampo no recuperó pelotas y Bologna otra vez se quedó con una pelota complicada en su área. Después supo encontrar el balón y trasladar el juego a cancha bohemia, pero sin juego vistoso y con demasiados errores. De hecho, la única clara que tuvo después de aquella primera llegada fue un cabezazo de Olivera que fue contenido por Diego Pérez.
El comienzo del complemento, sin variantes, fue más entreverado de lo que se había visto en la primera parte. Impreciso, el equipo del Polilla desaprovechó las aproximaciones al área y las pelotas quietas, ante un calmo rival que también se vio desinflado, pero que se mantuvo atento a no desperdiciar las posibles ocasiones.
Así, con una jugada de pelota quieta que se hizo como de pizarrón, Sebastián Gagnebín encontró el gol y a los 60 minutos puso al locatario a ganar por 1-0, tras definir por lo bajo un remate que la defensa no pudo desviar y tampoco Bologna, a pesar de intentarlo.
Era justa la victoria parcial de Wanderers porque había hecho mérito para conseguirla ante Peñarol que presentó posiblemente su peor juego en lo que va del Apertura. Sin embargo, el capitán Darío Rodríguez emparejó las cosas: se desmarcó para recibir un centro que llegó de un tiro libre y de cabeza definió al segundo palo de Pérez para empatar cinco minutos después de que se abriera el marcador.
El juego que hasta ese momento era aburrido se transformó en partidazo porque tres minutos después el Carbonero ganaba 2-1: otro tiro libre fue recibido por Zambrana, ingresado en el segundo tiempo; Olivera la bajó de cabeza y Estoyanoff, de bolea, dio vuelta el marcador.
Los sobresaltos siguieron tras el segundo de Peñarol. Bologna paró un tiro libre que pudo haber significado la igualdad, y luego Zalayeta se perdió el tercero de su equipo.
A falta de un minuto para el final del tiempo reglamentario, Darío cometió una falta que le dio otro tiro libre a los de Alfredo Arias: ejecutó Maxi Rodríguez y cabeceó Olivera, y el guardameta argentino desvió la pelota que se metía al arco con la punta de los dedos.
Peñarol ganó y sacó cuatro puntos de ventaja en el Apertura a falta de dos fechas para su finalización. De ganar el próximo fin de semana se quedará con el título.

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