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lunes, 17 de septiembre de 2012

El último eslabón


Un centenar de personas que se oponen a la despenalización del aborto realizaron esta mañana una cadena humana frente a la Torre Ejecutiva. Nicolás Portela, del grupo "Movidos por la vida", dijo a Montevideo Portal que "la idea fue decirle al presidente José Mujica, a través de una proclama, las alternativas que queremos al aborto".
Un centenar de mujeres que se manifiestan en contra del aborto, realizaron esta mañana una cadena humana frente a la Torre Ejecutiva. Con el apoyo de otros grupos, leyeron una proclama en donde manifiestan la necesidad de buscar soluciones alternativas a la interrupción voluntaria del embarazo.
Nicolás Portela, del grupo "Movidos por la vida", dijo a Montevideo Portal que "fue una manifestación de mujeres autoconvocadas, y nosotros como organización decidimos adherir. La idea fue decirle al presidente José Mujica, a través de una proclama que le fue entregada, las alternativas que ellas quieren al aborto. Manifestaron su rechazo a estos proyectos que atentan contra la vida humana y proponen otro tipo de iniciativas".
"La actividad fue muy buena. Fueron sobre todo mujeres jóvenes, pero hubo de todas las edades. Fueron un centenar de mujeres de todas las condiciones sociales. Se hizo simbólicamente una cadena humana, todas agarradas de las manos y se le entregó la proclama al presidente en un sobre para que la analice", explicó Portela.

En la proclama, que puede leerse completa en el archivo adjunto al final de la nota, las manifestantes aseguran que "actualmente en el Parlamento se está llevando adelante una iniciativa que legaliza -no despenaliza- el aborto y nos dirigimos a usted porque conocemos la sensibilidad que estos temas le confieren".
"Algunas organizaciones han salido en nombre nuestro a predicar a favor de este supuesto derecho al aborto (a elegir la continuación o no de la Vida de nuestro hijo o hija) y queremos decididamente oponernos a esto. A nosotras, mujeres de a pie, ciudadanas comunes y muchas de nosotras pertenecientes a los rincones más olvidados del país, nadie nos ha preguntado qué queremos, qué soñamos, qué pretendemos. Señor Presidente, nosotras soñamos con un país inclusivo, generoso, solidario. La legalización del aborto y la práctica en sí misma, están lejos de representar estos valores. En el aborto, se excluye a alguien cuya vida es inexorablemente destruida, empeorado por el hecho de que esa vida pertenece a la criatura más indefensa y libre de culpa que alguien puede imaginar: el niño en el vientre materno", continúa la carta.

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