viernes, 29 de abril de 2011

acto policíaco


El jefe de Policía de Montevideo, inspector Walder Ferreira, considera que los actos de corrupción siempre existieron en la institución por la facilidad de oportunidades que poseen los efectivos. De todas formas, en una entrevista con Ultimas Noticias mencionó que la Policía se está profesionalizando permanentemente pero aún falta trabajar. A su vez, está de acuerdo con los megaoperativos llevados a cabo en el último mes y justificó que las detenciones realizadas fueron realizadas por agresiones que recibieron los efectivos en los barrios. Ferreira también afirmó que la imagen de la Policía que tiene la sociedad varía según el momento de seguridad o inseguridad que se viva en la población.Si tuviera que definir una prioridad hoy para la institución policial, ¿cuál sería?

-No tendría una sola, serían medios tecnológicos, humanos, materiales. Sin esas cosas es difícil a veces llevar adelante la función.

-Porque el mundo delictivo y el del crimen se perfeccionan en la medida en que la Policía...

-No acompaña esa profesionalización y nos vamos quedando atrás.

-¿Estamos muy lejos de eso hoy en día o se ha mejorado en los últimos años?

-Sí, se ha mejorado y se sigue intentando, los esfuerzos están hechos, creo que vamos en buen camino pero creo que aún falta. Siempre es poco de todos modos, pero creo que se está dando un buen paso. Muchas veces usted quiere desplegar una forma de trabajo, una estrategia, y por la escasez de esos medios no puede ser duradera en el tiempo, eso complica.

-¿La Policía está preparada hoy para enfrentar la actual cara del delito o algunas expresiones como, por ejemplo, el crimen organizado?

-Sí, la Policía está capacitada y se sigue capacitando. Hay grupos muy profesionales y direcciones que están trabajando en este sentido. Estamos en un buen camino.

-Respecto a los operativos que se hicieron este último mes, hubo muchos detenidos y pocos procesados. ¿Cómo se explica esto? ¿Puede dejar mal parada la actuación a la Policía?

-No, para nada. En principio, cuando nosotros hacemos un operativo no estamos pensando solamente en procesar elementos. La gran cantidad de detenidos es porque vamos a lugares donde la Policía es resistida, entonces ahí hay un repudio al uniforme policial y no tenemos más remedio que actuar ante determinadas faltas de respeto o insubordinación. Pero nosotros consideramos muy positivos los operativos, y entiendo que deberíamos seguir haciéndolos. Nosotros pretendemos tener una presencia en ese lugar, lugares que son conflictivos para la Policía. Y quizás acostumbrar un poco a la presencia policial en esos lugares.

-En qué momento del análisis que ustedes realizan, ¿consideran necesario realizar un operativo? ¿Por qué?

-Porque son lugares donde se está incubando un grupo que se va haciendo fuerte en esa zona. Y creemos que con esa presencia importante policial vamos a ir desestimulando esas prácticas.

-¿Cómo define esos grupos?

-Hay de todo un poquito. Narcos, organizaciones de menores, o menores que son utilizados para este tipo de delitos. Y las detenciones son a consecuencia de esta repulsión que genera el uniforme policial.

-¿Tienen algunas zonas determinadas en las que la Policía hoy no pueda entrar?

-No. La prueba está que ya hemos entrado, el tema es que si usted no puede entrar con dos policías no los va a arriesgar; entra con muchos más. Muchas veces esas zonas ni siquiera son factibles para poder patrullar porque no tienen caminería. Se dice que muchas veces no podemos entrar pero es simplemente para evitar enfrentamientos inútiles.

-¿Los megaoperativos son una estrategia en sí mismos o forman parte de una estrategia más global?

-Sí, yo pienso que forma parte de algo un poco más importante que es solamente el hecho de entrar a ese lugar.

-¿Hay más acciones previstas para desplegar?

-Sí, ya se están haciendo.

-El ministro diferenció estos operativos de las razzias, ¿cómo las diferencia usted?

-No tienen nada que ver. Primero, profesionalmente la razzia hoy no tiene sentido para la Policía; la razzia significaba parar a cualquier ciudadano y llevarlo detenido por el hecho de hacer números y generar un temor en la población. Acá no, si bien hay muchas detenciones; es porque le faltan el respeto a la Policía o se desacatan, porque se niegan a identificarse o incluso los apedrean.

-Y el hecho que después queden libres esas personas, ¿es una falla del Poder Judicial?

-Son detenidos por faltar el respeto. Se da cuenta al juez y él entiende que tampoco hay un delito por lo que corresponde darle la libertad, y está bien.

-¿Cómo cree que es vista hoy la Policía por la sociedad?

-Hay sectores que nos ve en franco proceso de profesionalización, hay otros que no tanto, pero yo digo que a veces se mide según el momento. Hay momentos que la seguridad o inseguridad se torna más visible o más palpable, y a lo mejor ahí la imagen de la Policía decaiga un poco.

-La inseguridad de la que se habla, ¿es real o está inflada como producto de los medios o la política?

-Sí, es discutible. Hay una realidad y a veces hay una sensación, pero no vamos a desconocer que sí hay inseguridad y es palpable. Pero a veces influyen determinados hechos para que esa realidad o esa sensación sea más o menos. Tal vez estamos fallando en la prevención, pero hay un muy buen trabajo de la Policía que no es la totalidad, pero sí una gran parte de los procesados y el esclarecimiento de los delitos.

-¿Es frustrante para el policía que anda en la calle, arriesgando su integridad, detener a un menor y después ese ladrón de pronto se fuga o queda libre? ¿Eso puede desestimular la acción policial?

-Yo trato de que no sea así, el tema de minoridad es una realidad; pero tampoco vamos a echarle todas las culpas de la inseguridad. Si nosotros pretendemos ser profesionales, estas cosas no pueden decaer la moral de la Policía, si bien nos gustaría que no se fuera nadie; si se van trataremos de agarrarlo todas las veces que sea necesario y de eso se trata, es la función policial.

-¿Cree usted que se redujo la problemática de la corrupción interna, que muchas veces se ha adjudicado a los bajos salarios que reciben los policías?

-No concibo el tema de corrupción por bajos salarios, porque también he visto corrupción en altas esferas. Pero yo siempre digo, y conozco bastante, que en la Policía ha habido corrupción, hay y la habrá. No sé si corrupción o corruptela, pero sí hubo actos, hay y siempre habrá porque es una institución en que es muy fácil llegar a esas posibilidades que no tienen otros que de repente son honestos por no tener oportunidades. El policía permanentemente tiene la posibilidad latente. Pero yo no creo que sea un índice altísimo teniendo en cuenta los factores que dice usted.

-¿El policía hoy está mejor en sus condiciones de vida que hace 5 o 10 años?

-Se ha mejorado muchísimo, se hizo un gran esfuerzo para mejorar. El policía es policía las 24 horas por más que a determinada hora largue el servicio y se vaya a su casa. Esas cosas hay que pagarlas, si bien ha mejorado, falta muchísimo.

“NO CONCIBO” LOS PAROS POLICIALES

El jefe de Policía manifestó a Ultimas Noticias su oposición a los paros policiales.

“No los acepto y no los concibo, así, lisa y llanamente", afirmó Ferreira.

La declaración fue en referencia al intento de paro que realizaron 17 policías de la seccional 7ª el tres de febrero pasado, en reclamo de haberes que supuestamente estaban mal descontados de sus salarios. Los efectivos no lograron adhesión de los sindicatos policiales en esta medida y fueron sancionados por esta acción.

El jerarca policial justifica su postura expresando que la Policía es "una institución verticalista que tiene el deber de proteger a la ciudadanía". A su vez, afirmó que los efectivos policiales tienen el deber de "proteger a la ciudadanía" y su servicio es esencial en todo sentido.

"No concibo un día sin policías en la sociedad, ni a los policías haciendo paro", agregó Ferreira.

Si bien el jefe no es contrario a los sindicatos, considera que un gremio puede ser útil si se trabaja de forma seria.

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