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sábado, 2 de octubre de 2010

el burdel de la vergüenza

La directora departamental del INAU y otros ocho funcionarios de la institución fueron detenidos e incomunicados por la Justicia de Paysandú que investiga su relación con casos de prostitución infantil. En la madrugada continuaban declarando.

Hasta ultima hora de ayer, la jueza penal de Paysandú, Blanca Rieiro, tomaba declaraciones a la jefa departamental del Instituto Nacional del Niño y el Adolescente del Uruguay (INAU), Mónica Innella, y a otros ocho funcionarios de esa institución en procura de determinar responsabilidades en posibles delitos de corrupción de menores y prostitución infantil.

En medio de total hermetismo, en las últimas horas del jueves 30 la Dirección de Investigaciones de la Policía de Paysandú efectuó varias detenciones y derivó a los involucrados a diferentes dependencias policiales donde permanecieron privados de su libertad e incomunicados hasta el mediodía de ayer viernes, cuando fueron conducidos al Juzgado Penal donde declararon durante varias horas. Recién después de seis horas de interrogatorios algunas de las funcionarias que trabajan en el Hogar Femenino de Paysandú comenzaron a ser liberadas tras declarar como testigos en la investigación que involucraría a algunas de las menores alojadas al cuidado del INAU.

Extraoficialmente se conoció también que la Policía habría entregado a la jueza los libros de anotaciones retirados de la dependencia donde se alojan las menores, en los cuales se documentarían las salidas nocturnas durante las cuales se producirían los actos de prostitución que se pretenden esclarecer.

Jorge Ferrando, integrante del directorio del INAU, dijo a El País que estaban a la espera de ver qué surge de las indagatorias. "No tenemos novedades, no sabemos si la jueza tomará ya alguna decisión", dijo y resaltó que en virtud de lo que determine la Justicia se evaluará qué medida tomará el organismo con los presuntos implicados en este caso.

"Todavía no podemos adelantar nada. No sabemos bien qué dimensión tiene el tema y qué elementos nuevos puedan surgir", aclaró Ferrando.

El jerarca del INAU señaló que "hace tiempo" que se viene trabajando en Paysandú sobre situaciones vinculadas a la prostitución infantil.

"De hecho el propio INAU hizo denuncias que motivaron una intervención del juzgado en crimen organizado", recordó. "Es una situación que sabemos que existe y obviamente nos preocupa", destacó al tiempo que mostró sorpresa de que en esta oportunidad los investigados sean los propios funcionarios -y una jerarca- del INAU.

"Habrá elementos que lo justifiquen y habrá que ver qué surge de esta indagatoria", sentenció Ferrando.

Indignados. En la sede judicial estuvieron presentes durante las actuaciones la abogada del INAU, Laura Alonso, y un abogado del gremio de funcionarios, así como familiares de las personas investigadas y funcionarios del instituto.

Entre estos últimos se expresó indignación por la forma en la que se realizaron los procedimientos con jerarcas y funcionarios, aduciendo que en estos casos las denuncias siempre han partido de la institución.

Antecedente. En julio de 2009, la Justicia procesó en esta ciudad a personas que contrataban servicios sexuales de menores alojadas en el INAU. Se presume que estas actuaciones podrían ser derivación de aquellas investigaciones.

El año pasado la Policía y la Justicia lograron desbaratar una red de prostitución infantil que involucraba a 20 adolescentes en el departamento sanducero. La investigación concluyó con dos personas procesadas.

Un año antes, en 2008, había comenzado la investigación que buscaba probar que existía en Paysandú una red de prostitución infantil. Pero recién en marzo de 2009 lo consiguieron. La Justicia recibió una denuncia del autoridades locales del (INAU. Una de las jóvenes había ingresado a la institución y tenía antecedentes de haberse prostituido. La conducta de varias adolescentes hicieron sospechar a los responsables del INAU de que algo extraño estaba sucediendo. (Producción: Federico Castillo).

Relatora de ONU advirtió los casos
Según una relatora especial de la ONU que visitó Uruguay en las últimas semanas, la trata de personas, en especial de niñas para la explotación sexual, está creciendo en el país.

Durante cinco días Joy Ngozi Ezeilo, relatora especial del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas sobre trata de personas, especialmente de mujeres y niños recorrió algunos puntos del Uruguay.

Estuvo en Montevideo, Colonia y Paysandú y se entrevistó con el canciller Luis Almagro, con jueces y fiscales de juzgados de Crimen Organizado, jerarcas y técnicos de la Suprema Corte de Justicia, de diversos ministerios, del Instituto del Niño y el Adolescente e integrantes de la sociedad civil.

Al concluir su visita, la experta presentó un resumen del informe que elaborará sobre la situación del fenómeno en Uruguay y que en junio de 2011 enviará al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.

Ngozi indicó que en Uruguay el "campo de mayor importancia para la trata es la explotación sexual, y en segundo lugar la explotación con fines de trabajo. El primero se nota mucho más, pero el segundo incluye el trabajo en la industria pesquera, en agricultura y es un fenómeno que va en aumento. No es tan visible, entonces no se conoce tanto como la explotación sexual". En sus conclusiones, la experta indica que Uruguay es un lugar de fuente, tránsito y destino de personas con fines de trata, y señala a Europa como principal destino.

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