La crisis de dirección que hay en la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE) llamó la atención del presidente José Mujica y de sectores del Frente Amplio. Mujica pedirá informes sobre la decisión de remover a los directores de los hospitales psiquiátricos, resuelta a propuesta por el representante sindical en ASSE, Alfredo Silva, con el apoyo del delegado de los usuarios, Wilfredo López, y del presidnete del organismo, Mario Córdoba.
El ministro de Salud Pública, Daniel Olesker, dijo el jueves que no le corresponde intervenir en las decisiones de ASSE, pese a que reconoció no compartir algunos cambios. Las remociones de los directores de los hospitales psiquiátricos fue uno de los motivos que llevaron a la renuncia esta semana del director del Programa Nacional de Salud Mental, Lizardo Valdéz. (Ver notas relacionadas)
Olesker destacó esta mañana en radio Carve la importancia de que los nuevos directores —de centros auxiliares y hospitales— hayan firmado un contrato de gestión que en caso de no ser cumplido implicará el abandono del cargo. "Confiamos en el procedimiento", dijo.
Desestimó que haya existido una purga y recordó que en el período anterior se cambió el "99,5% de los cargos". Sobre la preocupación de Mujica por los cambios (el mandatario pidió informes sobre la decisión) dijo que "la relación del presidente, el ministro y ASSE son relaciones internas al gobierno" y declinó confirmar, o desmentir, si existe tal malestar.
Por su parte, los senadores frenteamplistas Mónica Xavier y Rafael Michelini anunciaron que plantearán la crisis que vive ASSE en la interna de la coalición de izquierda.
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