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viernes, 7 de mayo de 2010

ser niño

Los funcionarios que integran el sindicato del INAU no están conformes con la gestión de la actual directiva del organismo, encabezada por Nora Castro, según confiaron algunos dirigentes a EL PAÍS digital.

Hoy, en una reunión con la ministra de Desarrollo Social, Ana María Vignoly, plantearán la realización de una auditororía general del organismo.

Mientras tanto, en los últimos días han surgido denuncias, por parte de los internos, de golpizas y palizas.

"Tengo miedo que los funcionarios le hagan algo. No es la primera vez que le pegan. En otros dos hogares le ocurrió lo mismo", dijo a El País la madre del menor agredido en el Hogar Puertas, María De Lima. En actas levantadas por asesores legales del Instituto, el interno dijo que hace 15 días se encontraba en su habitación cuando ingresaron cinco funcionarios del centro y comenzaron a golpearlo.

"Me dieron tremenda paliza", explicó el joven de 14 años, quien se encuentra recluido en el INAU por tres rapiñas cometidas en Montevideo y Canelones.

La causa de supuesta agresión se debió a que el adolescente tiene problemas personales con uno de los funcionarios del Hogar Puertas, según fuentes del organismo.

Días después del incidente, un técnico del Hogar Puertas se comunicó con De Lima para informarle que su hijo había sido golpeado.

La madre del menor se dirigió al centro y le permitieron ingresar al recinto pese a que no era un día de visitas. "Mi hijo tenía toda la cara inflamada. No abría un ojo por un golpe", afirmó.

Por temor a represalias, De Lima no denunció el hecho a las autoridades del INAU ni a la Policía. "No quise denunciar porque mi hijo va a seguir estando allí. No quiero que me lo maten y después digan que murió en un lío entre menores", expresó la mujer.

Sin embargo, la golpiza fue denunciada por un técnico del Hogar. A partir de allí, las autoridades del organismo decidieron iniciar una investigación administrativa y ordenaron que el menor fuera trasladado al Hogar Desafío.

PROBLEMA. El otro incidente que involucra a un funcionario y a un menor, ocurrió a mediados de marzo de este año. El menor fue internado en un centro asistencial por tener dos costillas rotas y contusiones varias, según los denunciantes.

El funcionario denunciante concurrió al despacho del gerente del Sistema de Ejecución de Medidas a Jóvenes en Infracción (Semeji), Jorge Jouroff, junto con una delegación del sindicato del INAU. Tras recibir la denuncia, Jouroff ordenó una investigación administrativa. Poco después, las autoridades del organismo decidieron remover del cargo al director denunciado.

El presidente del gremio del INAU, Joselo López dijo que no se enteró que un segundo adolescente había recibido golpes en hogares del Instituto. "Si constatamos situaciones anormales después de un motín, las denunciamos", dijo. El País Digital

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