fúmate un aedes

La Intendencia de Montevideo está controlando la fumigación en los espacios públicos para evitar que, en el afán de combatir a los mosquitos que por estos días pican a mansalva, se termine rociando una cantidad excesiva de insecticidas que puedan afectar a otros insectos e incluso a los seres humanos, declaró a Observa el director de Salud de la IMM, Gerardo Lorbeer. El jerarca dijo entender la molestia que la ola de mosquitos le causa a la gente pero advirtió que en los parques y plazas ya se está fumigando al límite de lo “racional”. “Con los insecticidas hay que ser muy equilibrados. Es como si usted llegara a su casa y se pasara por el cuerpo toda la barra de repelente. Le va a perjudicar la piel”, afirmó Lorbeer. Paciencia es lo que piden las autoridades ante esta situación provocada por el calor y el alto índice de humedad. Lorbeer dijo que la preocupación de la intendencia pasa por evitar que en las aguas estancadas aparezca el Aedes aegypti (transmisor del dengue). Los mosquitos que por estas horas son legión pertenecen a la especie Ochlerotatus albifasciatus, cuyas larvas son depositadas en el barro y, cuando pican, solo dejan roncha.