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viernes, 6 de noviembre de 2009

armado hasta los dientes


El candidato del Partido Nacional, Luis Alberto Lacalle, cree que el caso Feldman tiene “carácter de terrorismo” y no de tráfico de armas. “Es un episodio de una gravedad mucho mayor de la que parece”, afirmó, al considerar sus connotaciones políticas.
Con las declaraciones de Jorge Batlle de ayer, en torno a un posible vínculo de los tupamaros con el arsenal de armas del fallecido Saúl Feldman, dicho caso policial parece haber ingresado definitivamente en la campaña electoral.

Ayer adelantábamos que legisladores nacionalistas recibieron datos “datos firmes” sobre vínculos de Feldman con grupos de izquierda y pensaban investigar al respecto. Las palabras del presidenciable nacionalista Luis Alberto Lacalle parecen confirmar esta tendencia.

"Tengo elementos para sospechar que el hecho del arsenal de 700 armas halladas días atrás en casas de Montevideo y Shangrilá sí tiene connotaciones políticas", afirmó Lacalle en diálogo con el periódico argentino Clarín.

"Los brasileros compran en otro mercado y además compran armamento más nuevo. Acá había fusiles y revólveres envueltos en diarios Clarín de 1982", comentó el presidenciable."Tengo sospechas fundadas, pero por el momento no puedo ir más hondo", manifestó. "De todas formas, estamos trabajando en el tema porque pensamos que es un episodio de una gravedad mucho mayor de la que parece, si se tiene en cuenta el poder de fuego de las armas encontradas y de algunos puntos de cómo se tramitó el episodio. Lo que sospecho o creo por ahora no puedo decirlo, pero es un hecho que tiene carácter de terrorismo", agregó.

Desde el Frente Amplio se ha criticado con dureza el enfoque la oposición está haciendo sobre el caso, al considerar que se “embarró la cancha” y que “empezó el juego sucio”.

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