Graves incidentes se registraron en el exterior de tribunales, tras conocerse el veredicto del caso Cromañón. Pese a que hubo numerosas sentencias, todos los condenados quedaron libres en espera de apelacionesEn tribunales se encontraban presentes los numerosos implicados. Los familiares de las víctimas, que entendían que los músicos tuvieron su cuota de responsabilidad, pese a que ellos también perdieron seres queridos en el siniestro. También están en entredicho las autoridades de contralor de los establecimientos bailables, así como el regente del boliche Cromañón: Omar Chabán.
Finalmente, sobre las 15.20, el presidente del tribunal dio lectura pública a la sentencia. Omar Chabán fue condenado a 20 años de prisión. El otro gran culpable fue el manager de Callejeros, Diego Argañaráz, quien recibió condena a 18 años de prisión.
El subcomisario Ruben Díaz fue condenado a 4 años de cárcel por cohecho y corresponsabilidad en el incendio, que costó la vida de 193 personas y causó heridas a otras 1432.
Fabiana Fiszbin, y Ana María Fernández, funcionarias del gobierno porteño en tiempos del siniestro, recibieron penas de dos años de prisión. Sin embargo, todos los condenados quedaron el libertad, en espera del resultado de eventuales apelaciones.
Hasta que quede firme el fallo, los condenados deberán fijar domicilio, no pudiendo ausentarse del país. Chabán deberá realizar también tareas comunitarias.
La resolución despertó la cólera de los familiares de las víctimas que se concentraban en las barras del edificio judicial, así como en el exterior del mismo.
Disconformes con la absolución de los músicos, centenares de personas tumbaron el doble vallado que protegía el edificio, apedrando el lugar.
Una multitud se precipitó sobre las puertas del edificio, donde se trabó en lucha con dos escuadrones policiales. Mientras los seguidores de Callejeros celebraban la absolución de los artistas en la cercana Plaza Lavalle, los parientes y amigos de las víctimas del incendio rechazaron la resolución, entendiendo que los condenados deberían ir a prisión de inmendiato, y que dicha condena debería haber recaído también sobre los integrantes de la banda de rock.
Estos últimos recibieron una sanción económicas, aunque se descuenta que la fiscalía apelará el fallo.
Miguel Angel Belay, ex policía, y Gustavo Torres, el ex director general de Fiscalización y Control del Gobierno porteño, también resultaron absueltos.
La tragedia ocurrió la noche del 30 de diciembre de 2004 en el local bailable República de Cromañón, durante un concierto de la banda roquera Callejeros, cuando el lanzamiento de bengalas desató un incendio que causó la muerte de casi doscientos jóvenes, sobre un total de 3.000 que asistían al evento, por asfixia e inhalación de sustancias tóxicas.
El incendio se desató cuando algunos espectadores del concierto, que no fueron identificados en el juicio, lanzaron bengalas que tomaron contacto con material inflamable en el techo, según la investigación.
Una ancha puerta de escape estaba clausurada y la de emergencia no daba abasto, lo que convirtió el recinto en una trampa mortal con emanaciones de gases, cuando unas 3.000 personas asistían apiñadas al recital, un número superior al permitido por la habilitación.
La mayoría murió por inhalación de ácido cianhídrico, una sustancia altamente tóxica que se desprendía de los paneles acústicos del techo, según se supo en el juicio.
Montevideo Portal
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