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viernes, 14 de agosto de 2009
maciel : sala de urgencias
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La interpelación a la ministra de Salud María Julia Muñoz terminó sin consecuencias este jueves, después de siete horas de debate. La bancada oficialista respaldó su actuación en el caso de irregularidades en el pago de horas a la empresa de limpieza Clanider. El Partido Nacional, el Partido Colorado y el Partido Independiente votaron juntos una moción que declara “absolutamente insatisfactorias” las explicaciones de la ministra.
Durante la interpelación, el miembro interpelante Jorge Gandini anunció que tiene datos para realizar una denuncia ante la Justicia que involucra a Alejandra de Mello, la esposa del senador Eleuterio Fernández Huidobro. “Con habitualidad, varias veces por semana, en horario de trabajo de sus funcionarios, con un vehículo, la propia señora Alejandra de Mello, encargada o gerenta de la empresa, levantaba material de limpieza del hospital que le pertenece, equipo que le pertenece, y entre cuatro y seis funcionarias de la empresa y en esa camioneta las trasladaba a casas particulares y algunas empresas a limpiar en ese horario. Esas horas de esas trabajadoras se cobraban como extras, 100 pesos la hora, pero también las cobraban a final de mes al Hospital Maciel”, afirmó.
Gandini dijo que tiene detalles específicos de estos movimentos que describió como habituales y dijo que no tiene más remedio que presentar la denuncia. El diputado blanco dio a entender que maneja los datos de los lugares concretos a los que se concurría a limpiar en estas maniobras.
Desde la bancada del Frente Amplio uno de los que se encargó de responder fue el diputado Eduardo Brenta, que recordó anteriores denuncias de Gandini que terminaron con su retractación, como las hechas contra Benjamín Liberoff, como referente de un caso de corrupción durante la administración de Tabaré Vázquez en la Intendencia. Para hacerlo leyó una nota de prensa en la que se relata el momento en que Gandini tuvo que retractarse ante la Justicia por sus dichos sobre Liberoff.
La interpelación se desvirtuó al menos en dos sentidos. La excesiva contextualización por parte del gobierno y la multiplicación de frentes de ataque por parte de la oposición. La situación degeneró en un intercambio de acusaciones en medio de un escenario teñido por las cuestiones electorales. En este sentido la ministra acusó a los legisladores blancos de seguir órdenes de Luis Alberto Lacalle para interpelar a los ministros del gobierno. “Cuando el jefe manda en un partido, los hombres del partido responden. Y el jefe del partido mandó a interpelar a los ministros de este gobierno. Por lo tanto, sabíamos que por este o por cualquier otro tema íbamos a tener que estar acá y con todo gusto le queremos contar al Parlamento lo que hemos dicho, por qué lo hemos hecho, cuando hemos festejado que la gente haya mejorado su calidad de vida”, dijo la ministra.
El diputado nacionalista Raúl Casás agregó denuncias sobre irregularidades en el pago a obreros del Sunca por construcción de policlínicias en Canelones.
Después de la primera participación del miembro interpelante, los jerarcas del ministerio se tomaron más de dos horas para exponer lo que en su mayoría fueron datos generales sobre el avance del Maciel y de la reforma de la salud en general.
Hablaron de la importancia de la limpieza del hospital y de la fragilidad de las acusaciones pero además desarrollaron largamente detalles sobre los avances generados en el hospital incluyendo mención a un museo y a actividades culturales. También se habló del Fondo Nacional de Recursos (FNR) y su presupuesto y del presupuesto de la salud pública en general, además de las transformaciones logradas con el nuevo Sistema Nacional Integrado de Salud.
Después de las casi tres horas de exposición de las autoridades, el diputado interpelante presentó sus quejas. “La verdad que la respuesta del gobierno ha sido una gran decepción. Casi que me arrepiento de haber agradecido que viniera tan prestamente. Hubo mucho contexto y pocas respuestas. Mucha ironía y pocas respuestas. Hemos escuchado hablar de todos los temas... faltó el Tamiflu. Después de todo, de los museos, de los menús que se dan en el Hospital, no sé si se mencionaron las kilocalorías, se habló de la sala de acto, se nos habló del FNR... Yo recuperé un poco la ilusión cuando el director general, que es contador, dijo 'y por último me voy a referir a dos temas que no hemos tocado'... Bueno la palabra limpieza la dijo una vez cuando empezó su intervención, no la dijo más”, afirmó.
En su intervención Gandini dijo que ya había perdido las esperanzas de recibir respuestas a sus preguntas y dijo que para él la interpelación estaba terminada.
Respecto al asunto concreto de la citación de la ministra hubo pocas novedades. El Partido Nacional, apoyado al final por el diputado Gustavo Espinoza, insistió en las dudas que dejan las declaraciones del senador Fernández Huidobro sobre el momento en que el director del Maciel, Daniel Parada, fue a atenderlo a su casa y en ese momento surgió la idea de que la empresa en la que trabaja su esposa podía solucionar el problema con la limpieza que tenía el hospital. También sobre lo que los nacionalistas llamaron una “licitación a medida” para que la ganara la empresa Clanider y lo dudoso de la maniobra del Maciel, después de descubierta la irregularidad de las horas sobrefacturadas para arreglar la situación mediante un convenio.
La ministra Muñoz se limitó a decir que las acusaciones fueron presentadas en condicional y sin pruebas. Y que ante la comprobación de hechos de corrupción sería ella la primera en tomar medidas Los diputados oficialistas defendieron encendidamente al gobierno. Al principio el protagonismo fue del emepepista Vega, pero después aparecieron los diputados de los dos sectores involucrados directamente en la situación.
Edgardo Ortuño y Eduardo Brenta, de la Vertiente Artiguista, sector al que pertenece Daniel Parada, acusaron explícitamente a Gandini de mentir en su acusación. También acusaron a la bancada del Partido Nacional de actuar por intereses electorales. A esta idea también se sumaron los diputados de la Corriente de Acción y Pensamiento que lidera Eleuterio Fernández Huidóbro. Entre ellos, Carlos Gamou fue el que hizo la defensa más encendida de Huidobro y de su esposa.
“Ella es una trabajadora, es una trabajadora que es gerenta de una empresa. ¿Que empezó a trabajar ahora en estos temas porque alguien se le ocurrió inventar una licitación trucha en el Maciel...? No, sabe que no. Antes trabajó en la empresa Jackson, en la Liga Sanitaria, que empezó trapeando, trapeando... Eso de repente molesta, una mujer independiente y trabajadora. Tiene un buen conocimiento, aprendió el oficio. No es lo mismo trapear el baño de un hospital que una sala de emergencia, un CTI o un quirófano. En este país esto es lo que debería preocupar. En este país durante muchos años se trapeaba con el mismo trapo de piso el baño del Maciel y el quirófano. Ahí no veía a nadie preocupado por el Hospital Maciel”, dijo Gamou.
En las siete horas de interpelación hubo de todo. Se llegó a discutir sobre si Tabaré Vázquez aplaudió a la dictadura o no, detalles sobre cantidad de obreros trabajando en la construcción de policlínicas en Canelones, si estamos en tiempos electorales o electoreros y rigurosidad informativa de los medios y de los legisladores.
El último en hablar fue el diputado Juan Carlos Souza, de la CAP-L que atacó a José Carlos Cardozo del Partido Nacional. El diputado blanco había reclamado mayor rigor en el manejo de información y Souza le recordó que se comió declaraciones falsas de José Mujica en la sección humorística de El Faro del Final del Mundo en La Diaria y también advirtió sobre otros personajes que no escriben en serio, como Kid Grajea o Darwin Desbocati en Búsqueda.
Finalmente se votaron las dos mociones presentadas y la del oficialismo salió aprobada por 48 votos en 76. Iván Posada, del Partido Independiente, votó con la oposición.
(Informe de Ricardo Leiva, No Toquen Nada)
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