La senadora Lucía Topolanski respaldó al Ministro Bonomi y aseguró que "no se le mueve un pelo" por la interpelación al jerarca. Asimismo, achacó responsabilidad en el incremento de delitos a "la pasta base que entró a Uruguay durante el gobierno de Jorge Batlle".La senador a Topolanski reconoció que el tema seguridad genera gran preocupación en el gobierno. Sin embrago, recordó que los índices de criminalidad son bajos en comparación al resto de los países de la región, aunque reconoció que resultan elevados "si se mide con los índices delictivos que había en Uruguay años atrás".
En diálogo con el matutino La República, la esposa del presidente sostuvo que la pasta base "que entró al Uruguay durante el gobierno de Jorge Batlle" es uno de los factores determinantes en el aumento del delito y en la violencia irracional con la que algunos se perpetran.
En sus declaraciones la senadora fustigó la criminalización de la juventud. "Cada asalto que ocurre lo vinculan con un menor y lo asocian al plebiscito", dijo la senadora, recordando que en nuestro país "tenemos más de 300 menores infractores en una población carcelaria de 9.000 presos, de los cuales el 70% son adictos".
Interrogada acerca de los más recientes y sonados hechos delictivos, Topolansky sentenció que el Ministerio del Interior viene "trabajando bien" y que el ministro Bonomi "tiene todo nuestro respaldo" pero que "no se puede poner un patrullero lleno de policías en cada comercio" para prevenir rapiñas.
Respecto al homicidio de un empleado de un local de La Pasiva ocurrido durante el fin de semana, Topolanski manifestó su consternación, así como la sospecha de que será explotado políticamente por la oposición para la campaña por la reducción de la edad de imputabilidad.
En cuanto a la futura interpelación parlamentaria del ministro Bonomi, la primera senadora aseveró que "ni a mi ni al gobierno se nos mueve un pelo (...) porque solo se busca tener un minuto de gloria en ese afán de protagonismo político. Están haciendo una calesita con los llamados a los ministros".
En tal sentido, recomendó al diputado Cardoso que le pregunte a Bonomi sobre el origen del Comcar, "una cárcel que no tiene un lugar donde se lleven a cabo las visitas".
La senadora refirió que los gobiernos progresistas debieron acometer la tarea de "desarmar aquel adefesio de las celdas de latas que puso Stirling; arreglar la mescolanza que había entre los presos, en donde se mezclaban los primarios con los que ya tenían antecedentes y aplicar por fin una política carcelaria seria, mejorando incluso los salarios de la Policía".
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