El presidente José Mujica afirmó en la cumbre de CELAC que América Latina precisa de la unidad. "No es la hora de un imperialismo a la inglesa, es la hora de entender que necesitamos nervios comunes de una política defensiva común". Además, Mujica firmó acuerdo con Chávez para la producción conjunta de envases de vidrio.
l presidente José Mujica afirmó en la cumbre de CELAC que América Latina precisa de la unidad. “No es la hora de un imperialismo a la inglesa, es la hora de entender que necesitamos nervios comunes de una política defensiva común” Durante su discurso en la cumbre de la CELAC, el presidente José Mujica abogó por una mayor integración en América Latina y particularmente por lograr la conciencia de su importancia a la interna de cada país.
En ese sentido, Mujica señalo que “el punto débil más fuerte es que no hemos logrado una penetración de la conciencia pública masiva de los movimientos sociales de las masas. No hay un paro de los obreros portuarios por la integración. No paran las universidades de América Latina -donde esta la supuesta inteligencia- por un gesto de integración”.
“Hay mucho más que hacer en la agitación de la conciencia de nuestro propio pueblo porque sino tenemos el aliento y el empujón de los que andan a pie, en los cerros, en la negritud olvidada de este continente (…) no tendremos la fuerza para este tamaño desafío”, agregó.
Mujica advirtió que América Latina necesitará una actitud de defensa conjunta del continente: “La soberanía del viejo estado nacional esta jaqueada en contra de los débiles”.
“Algún día quienes han tenido olvidada la mirada hacia el Sur, miraran hacia el sur casi como un gesto defensivo (…) debemos estar juntos y fuertes. Debemos estar todos, derecha, centro, izquierda. El peor servicio que le podemos hacer al porvenir es no tener gestos de unidad y grandeza”, añadió el presidente Mujica, quien agradeció a Venezuela los países que asistieron a la cumbre, por la convocatoria y participación en la CELAC.
Acuerdo con Chávez
En tanto, Mujica se reunió con el presidente venezolano Hugo Chávez para firmar un acuerdo bilateral que permitirá la producción conjunta de botellas de vidrio.
El acuerdo se implementará a través de la empresa uruguaya Envidrio, que producirá en forma conjunta con la fábrica venezolana Venvidrio, expropiada hace un año y medio por el gobierno de Chávez y dedicada actualmente a la producción de 1500 toneladas diarias de envases de vidrio.
La cooperación entre ambas fábricas permitirá una producción de 1560 toneladas diarias, lo que permitirá mejorar las exportaciones de ambos países. Además, la empresa uruguaya compartirá conocimientos técnicos y de mercado con su par venezolana.
La colaboración entre Uruguay y Venezuela en la producción de vidrio no es nueva, ya que la propia Envidrio recibió apoyo financiero del gobierno venezolano para que los trabajadores recuperaran la fábrica y realizarán talleres de especialización y capacitación. Actualmente, la fábrica produce 60 toneladas diarias de vidrio.
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