cuentas saldadas

El Psic. Robert Parrado, licenciado en seguridad pública, dijo a Montevideo Portal que el caso de justicia por mano propia registrado en Pinar Norte, "habla de una sociedad crispada" y "que resuelve con más violencia sobre la violencia". Reconoció que "llama la atención" la poca importancia que los procesados "le dieron a su propia realidad".
El juez de Ciudad de la Costa Allen Denby procesó con prisión a tres personas por homicidio en calidad de autores, en el caso que investigaba la muerte de un joven de 20 años que el viernes en la noche intentó rapiñar un almacén.

El joven ingresó al comercio y apuntó a la madre de uno de los procesados, quien reaccionó y comenzó a forcejear con el rapiñero. Este último resultó herido en el tobillo con una bala calibre 22. Luego un vecino y un amigo del comerciante ataron al joven y comenzaron a golpearlo provocándole la muerte por desnucamiento, según revelaron este martes los resultados de la autopsia.

Consultado por Montevideo Portal, el Psic. Robert Parrado, licenciado en seguridad pública, explicó que "llama la atención que no hayan podido discriminar que ya estaba retenido y que hubo una detención ciudadana. Solo hay que esperar que llegue la autoridad. Llama la atención la poca importancia que le dieron a su propia realidad. Las consecuencias que esa acción podía tener. En definitiva habla de cómo están paradas esas personas que intervinieron en relación a la resolución de sus conflictos. Habla de una sociedad que está más crispada y que de alguna manera resuelve con más violencia sobre la violencia. No es bueno y las autoridades deben analizar cuáles son las mejores respuestas".

"El peor momento que vive quien es procesado, es cuando se enfrenta a la detención. Pero quizás allí no tomaron conciencia de las repercusiones. Tomarán conciencia cuando comiencen a hablar con los abogados y estén citados al juzgado. El peor momento es cuando el fiscal pide el procesamiento y es definido por el juez. Cuando le dicen la sentencia en presencia del juez, fiscal y defensores. Ahí toman conciencia en cuestión de segundos todo lo que viene delante. Empiezan a elaborar en su cabeza cómo será el primer día. Comienzan a aparecer los ruidos, olores, y cambios que van a ser inimaginables. Afecta a toda la familia de rebote. Porque está el trauma de haber vivido una muerte física, y su propia muerte cercana", explicó Parrado.

Asesinato

El hecho ocurrió en la esquina de Martín Fierro casi Eduardo Pérez, en un almacén recientemente instalado. El dueño del local, un hombre de 47 años, accedió en un primer momento a darle el dinero al joven, pero al ver que su madre se descompensó atacó al asaltante, con la participación de otros dos adultos que culminaron matando a Alexis Orona Reyes.

A juicio de Parrado, "hay un muy mal manejo de la frustración y resolución de los conflictos con mucha violencia".

Consultado sobre la coartada que montaron los procesados para ocultar el crimen, Parrado explicó que "todas las personas que transitan el camino de la justicia penal y tienen en riesgo su libertad, luchan y lucha por su libertad. Aún sabiendo que son responsables".

"Los procesados van a tener algún tipo de resentimiento. Pero no tanto con el ladrón, sino con la situación en general y la sensación de inseguridad. Puede resolverlo cambiando de rubro y haciendo otras cosas. Incluso con parálisis desde el punto de vista emocional. Si no tienen apoyo, se puede dar un efecto de desorientación. No van a saber para dónde salir. Hay mucha gente que vivió situaciones que estuvieron al límite de la ´justicia por mano propia´, y decían que de la cárcel salen y del cementerio no. Pero una cárcel, a veces, se parece a una cárcel del alma".

"Hay un colectivo que actúa como si fuera una sola persona. Pero en realidad es una pequeña masa como pasó en este caso o puede pasar con una patota en el estadio Centenario. Pero si hay uno que quiere separar, no tiene la suficiente energía para lograrlo en función de como están parados los demás. Ese colectivo que se une, como si fuesen neurotransmisores, queda conectado para resolver eso de esa manera como un colectivo"

Robert Parrado, es psicólogo, licenciado en seguridad pública y columnista del programa Viva la Tarde de radio Sarandí.