Durante toda la jornada de ayer no se trabajó en la planta de envasado de supergás y la escasez del combustible alcanza a todo el país. Autoridades plantearon medidas "alternativas" mientras se efectúa el recambio de dos millones de envases.
Tras una jornada de paro absoluto en la planta de envasado de supergás, las empresas no toman pedidos, no realizan repartos y casi no tienen garrafas para vender a aquellos que van a comprar a un punto de venta.
En la tarde de ayer se realizó una reunión tripartita en la Dirección Nacional de Trabajo para intentar destrabar el conflicto que mantienen, desde hace varios días, los trabajadores. Durante el encuentro se solicitó un cuarto intermedio a los empresarios y las autoridades negociaron a solas con los trabajadores.
"Fueron como dos horas y cuando salieron transmitieron que la solución podía venir por el lado de la reducción de la jornada laboral. Esto no cayó bien entre los empresarios e incluso en los representantes de Ancap porque esa medida aumentaría los costos", comentó a El País una fuente vinculada al sector empresarial.
El director Nacional de Trabajo Luis Romero, que fue quien negoció por el lado del gobierno, explicó a El País que la idea es buscar una "alternativa transitoria" mientras se realiza el recambio de garrafas. En ese marco no se descarta ninguna opción, incluso la reducción de la jornada laboral.
Uno de los reclamos de los trabajadores es que las empresas rebajen el contenido de las garrafas para evitar cargar con los 30 kilos que pesa el envase lleno. Romero dijo que se está analizando la posibilidad de cambiar dos millones de envases pero que es muy "difícil y costoso". "El cambio en las garrafas no se puede hacer de la noche a la mañana. Mientras se instrumenta buscaremos una alternativa transitoria para que los trabajadores no sufran tantos percances y problemas de salud", aseguró el jerarca.
El sindicato, por su parte, vio con buenos ojos la reducción de la jornada laboral como medida "alternativa" y se reunirán hoy en asamblea para decidir si vuelven a trabajar medio horario. Según pudo saber El País esta decisión tampoco solucionaría el desabastecimiento de supergás que hay en todo el país.
"Aunque obviamente es mejor a que no se trabaje", reconoció un empresario del sector.
El sindicato, además, se reunirá nuevamente el lunes con empresarios y autoridades. Esta vez el encuentro se centrará en el aspecto salarial. Los trabajadores piden un aumento del 100% del IPC.
TIRÓN DE OREJA. Esa fue la expresión que utilizaron fuentes del sector empresarial para describir el mensaje que el director de Trabajo, Luis Romero les dio a los sindicalistas.
El jerarca dijo que se les "transmitió" que el gobierno no quiere que la población sea "rehén" de la falta de gas. "También les dijimos que el desabastecimiento no va a dar resultado sino que va a complicar más la situación, por lo cual, apelamos a la buena voluntad de los trabajadores", afirmó.
El director aclaró que no se le solicitó al sindicato que terminara con la medida. "Ellos pueden decidir, nosotros no queremos presionar a nadie".
Cambian mensaje
El mensaje que escuchan los clientes que llaman al call center de la empresa Riogas cambió. Hasta el miércoles se pedía al usuario que llamara al día siguiente. Desde ayer, básicamente, se informa del desabastecimiento. "Debido a medidas gremiales en la plantas de envasado de supergás los puestos de distribución no cuentan hoy con producto para la venta" informa el mensaje.
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