camino despejado

El Departamento de Movilidad Urbana de la Intendencia de Montevideo apela a obtener nuevos subsidios del gobierno para enfrentar obras de vialidad y el funcionamiento del sistema de transporte de pasajeros.

Ómnibus con accesibilidad universal que son más costos, nuevos "corredores" viales y terminales. Los cambios que se propone hacer la Intendencia de Montevideo, en lo que resta del quinquenio, no solo necesitan de una renovación de la línea de crédito con el BID, sino también de un mayor aporte de las arcas del Estado.

Como diera cuenta El País, el 12,9% del presupuesto de Montevideo proviene del gobierno central: unos $ 800 millones. Sin embargo, las negociaciones de la Intendencia con la Presidencia de la República llevarían a que próximamente Montevideo reciba una partida adicional de $ 160 millones, en acuerdo con las restantes 18 intendencias, que entienden que la capital tiene "otros costos" que enfrentar. De todos modos, esta cifra sería "insuficiente", a juzgar por los dichos del director de Hacienda de la comuna, Arturo Echevarría, que entiende que Montevideo debería recibir "cuatro veces más".


En la globalidad del presupuesto municipal para el quinquenio hay un fuerte componente de inversión para el Departamento de Movilidad Urbana, creado por la administración de la intendenta Ana Olivera. Buena parte de las obras previstas se vienen financiando con una línea de crédito del BID aprobada en 2008 -de US$ 80 millones- que la Intendencia deberá renegociar en aproximadamente un año, conjuntamente con un mayor aporte del gobierno central.

"Nos planteamos proyectar y comenzar a implementar la Fase II del Plan de Movilidad Urbana en el marco del Plan de Ordenamiento Territorial. En ese sentido, durante el año 2012 nos planteamos, conjuntamente con los ministerios de Transporte y de Economía, firmar un nuevo préstamo que nos habilite a seguir adelante con el plan. Durante 2012 estaríamos elaborando los proyectos, ya con equipos propios. Seguramente el BID pida asesoramiento a alguna consultora una vez que estén prontos", informó a la Junta Departamental el director de Movilidad Urbana de la Intendencia, Gerardo Urse.

"De 2013 en adelante estamos sujetos a la aprobación de un nuevo préstamo para la segunda fase del plan", añadió el jerarca municipal. De estos nuevos fondos, depende entre otras cosas que se pueda avanzar en la reformulación del tránsito en Avenida Italia.

"Si el BID y el gobierno nacional acceden al nuevo préstamo, Avenida Italia será uno de los primeros proyectos a encarar en esta nueva fase. (…) Estamos en una etapa de estudio y hemos estado trabajando en los primeros anteproyectos. Pensamos que para 2012 podremos llegar a presentar, dentro de la Fase II, una propuesta ya muy avanzada para el carril de Avenida Italia", agregó Urse.

CAMBIOS. Los ómnibus con accesibilidad universal y tecnología Euro 3 -más amigable con el ambiente-, que la Intendencia les exige a las empresas de transporte desde enero de este año, "valen 40% más", informó a El País el presidente de Cutcsa, Juan Salgado.

Este valor representa una variable a ser ajustada en la nueva paramétrica de cálculo del precio del boleto, según coinciden las empresas y la Intendencia. "Necesitamos que, de alguna manera, el Estado nos ayude a lograr ese cambio, en beneficio de todos", sostuvo Urse. "El Estado de alguna manera está subsidiándolo, pero hay detalles de este plan que requieren de un mayor aporte", insistió.

Según el director de Movilidad Urbana, el transporte colectivo de pasajeros es el único que está haciendo el esfuerzo para disminuir las emisiones contaminantes a la atmósfera.

"Sentimos que solo las empresas de transporte público están trabajando para mejorar las unidades que incorporan y mejorar su compromiso con el medioambiente. No lo vemos en el transporte individual. Hoy no lo tenemos tampoco, lamentablemente, en el transporte de cargas", indicó.

La cifra
US$ 80: Es el préstamo del BID que la Intendencia firmó en 2008 para obras de movilidad. Hay un complemento municipal de US$ 20:

Sin recursos para estacionamientos
Urse reconoció que la Intendencia de Montevideo "no tiene los medios y los recursos" para generar los estacionamientos que se necesitan en distintos puntos de la ciudad.

"De las soluciones que se han visto a nivel internacional, la mayor parte corresponden a estacionamientos subterráneos debajo de las plazas, de las avenidas o de otros espacios públicos. No estamos en esa situación, el préstamo no nos permite esa apuesta. De manera que en función del volumen de endeudamiento que podían tener la Intendencia y el Estado para favorecer o para trabajar en el mejoramiento del transporte público, es que llegamos a esta primera etapa. Hubo que tomar definiciones y hubo que dejar cosas de lado", declaró el director de Movilidad Urbana.

Durante la administración del ex intendente Ricardo Ehrlich la Intendencia promovió fuertemente el llamado "Proyecto Reconquista", que en una de sus etapas promovía la construcción de un estacionamiento subterráneo sobre la rambla de Ciudad Vieja, detrás del Teatro Solís. Sin embargo, no logró captar inversores.

También se manejó construir un estacionamiento frente al Ministerio de Trabajo, pero no hubo avances.