domingo, 18 de julio de 2010

algo para calentar

Un hombre de unos 40 años que dormía en un monte cerca de la ciudad de Durazno es la segunda víctima de la ola de frío polar. Ayer, la temperatura siguió bajando. La ciudad de Trinidad amaneció con -5,6°C.

Tras la muerte de un hombre en la ciudad de Chuy (Rocha) y de un indigente en Durazno en las últimas horas, se levantaron voces en esta ciudad sobre la situación social que plantea el crudo invierno, reclamando la atención de las autoridades. Julio Arrillaga, ex cura párroco y conocido vecino, dijo que el gobierno departamental debería poner la atención en la franja de la población más desprotegida como algo de absoluta prioridad.

Llamó a los líderes políticos locales a procurar "el techo, el amparo, la ropa a los más pobres" y los convocó a que "saquen sus propuestas sobre la atención a la pobreza, que tiene que ser ahora, no mañana", dijo ayer. "Indudablemente que para sobrevivir a una situación de estas hay que estar mínimamente bien alimentado y luego tener ropa, pero alimentado: el calor empieza de adentro hacia afuera", opinó Arrillaga en un espacio radial.

En Durazno la presencia de indigentes en las calles no es algo habitual, aunque existen casos puntuales, como en plaza Independencia y en zonas aledañas a la ciudad.

El fallecido era un indigente de cerca de 40 años, conocido por un impedimento físico en una de sus muñecas, que frecuentemente solicitaba monedas en la zona centro.

Murió en un refugio hecho con ramas que habitaba en los montes próximos al puente "nuevo" sobre ruta 5, donde fue encontrado el viernes de tarde por una persona que pasaba por el lugar.

La disminución de la temperatura en los últimos días se vio reflejada en el consumo de energía eléctrica, que fue superando cada día los picos máximos del invierno, en la venta de gas y también en la demanda de aparatos de calefacción.

Varias casas de electrodomésticos consultadas por El País el viernes no tenían stock de equipos de aire acondicionado. "Se agotaron estamos esperando que llegue el embarque", comentó Gonzalo Suárez, gerente general de Barraca Europa. Y agregó: "Los equipos de aire acondicionado se están comercializando muy bien porque se transformaron en un producto accesible para cualquier persona".

Otros comercios habían agotado los convectores de aire.

También aumentaron las ventas de estufas a supergás y las halógenas, ambos productos más económicos.

Mientras un aire acondicionado para una habitación ronda los US$ 300, una estufa de supergás se vende en el entorno de los US$ 120 y una halógena US$ 25.

El frío también impactó en las ventas de acolchados y frazadas. Aunque los locales tienen stock, la comercialización de productos de abrigo aumentó "muchísimo" en los últimos días.

"Siempre que hace mucho frío se refleja en las ventas", comentó una vendedora de Grandes Tiendas Montevideo.

LOS PRONÓSTICOS. La ola de frío se extiende desde el Sur de Argentina y Chile hasta Bolivia, Paraguay, el Sur de Perú y la región amazónica de Brasil, de acuerdo a informes de cada país. El frío está asociado a un potente centro de alta presión atmosférica, poco común, instalado en el centrosur del continente sobre la provincia de Buenos Aires y Uruguay.

La estación automática del aeropuerto de Carrasco de Nimbus mostró en la evolución de la presión atmosférica desde la madrugada del viernes, "una subida muy rápida a valores altísimos", informó el sitio web de Met Uruguay. La presión alcanzó 1.041 hectopascales (Hpa). "A tener en cuenta que la normal son 1013 Hpa, y muy inusualmente se observan valores superiores a 1040 Hpa en estas latitudes", afirma Met Uruguay.

La madrugada de ayer fue la más frío de una semana gélida. El récord de temperatura mínima se registró en Trinidad, Flores, con -5,6°C. La mínima histórica para Uruguay fue -8°C en la ciudad de Mercedes, el día 9 de agosto de 1993, de acuerdo a las estadísticas de la Dirección Nacional de Meteorología.

Ayer se registraron fuertes heladas en casi todo el territorio nacional.

"En muchas de las estaciones meteorológicas se registró la mínima más baja en lo que va del año 2010", asegura Met Uruguay.

En casi todo el país se vivieron temperaturas bajo cero al abrigo meteorológico.

El organismo oficial mantiene el llamado de atención de color amarillo por "ola de frío", aunque el pronóstico para hoy anuncia cierto alivio: mínima de 4°C y máxima de 12°C.

Sin embargo, las lluvias pueden hacer del día del padre un domingo inhóspito en buena parte del país. En el Sur, además, las precipitaciones estarían acompañados de vientos que pueden llegar a presentar rachas "muy fuertes".

Para el lunes, según las previsiones oficiales, se habría superado el clima polar, con 8°C de mínima en Montevideo.

CONTRASTES. Si bien el mes de julio se está caracterizando por las bajas temperaturas, durante junio el invierno no se había hecho notar con todo su rigor.

De hecho las estadísticas de la Dirección de Meteorología establecen que el trimestre abril-mayo-junio fue más cálido que el promedio. Sobre la cuenca de la laguna Merín y el litoral atlántico el promedio superó en algo más de un grado las temperaturas esperables.

En el resto del país, el promedio fue de 0,7°C más de lo habitual. A esto se suma que llovió, en esos meses, entre 30% y 40% menos de lo habitual para el período.

Esta tendencia coincide con la estadística internacional: en el mes de junio de 2010, la temperatura en la Tierra fue 1,07°C superior al promedio para el mes, según los registros de todo un siglo. O sea, el junio más cálido que se haya registrado, según el análisis mensual del centro de datos de la NOAA (Administración Atmósferica y Oceánica Nacional de EE.UU.).

El informe de perspectivas climáticas en Uruguay para el trimestre julio-agosto-septiembre establece que es probable que en el litoral Oeste se presenten valores de temperatura inferiores a los normales, aunque indica que el resto del país "presentaría condiciones cercanas a lo normal".

El invierno más frío en todo el país fue el del año 2007 con 10,1° C de temperatura media, casi dos grados de promedio por debajo del marca estándar para la época, que es 12°C.

La cifra
10,1°C Fue la temperatura promedio en Uruguay en el invierno de 2007, el más frío del que hay registro, con 2 grados por debajo de lo normal.

La vida a la intemperie en la semana más fría del invierno
Irineo Melo Rodríguez (73) está en situación de calle desde hace "muchos años". Lo han ido a buscar de diferentes refugios. Fue y probó. Pero siempre volvió a "su casa": un rincón debajo del puente Sarmiento. El motivo que lo hizo regresar una y otra vez se llama "Manchita", una perra que lo acompaña desde hace 16 años.

"Voy a estar con ella hasta el final de sus días, porque es mi familia. El día que no la tenga más me iré a un refugio, pero ahora no la voy a dejar. Voy a sufrir la misma condena que ella", resume Rodríguez y se lamenta porque ve a su mascota "viejita".

Dice que antes vivió bien. Tuvo su casa y enumera más de 10 lugares en los que trabajó, incluso en Brasil y Argentina.

Al ser consultado por el motivo que lo dejó en la calle se emociona y no emite palabras. Segundos después reflexiona: "circunstancias de la vida. Una prueba que me puso Dios para que conozca otra realidad y aprenda a sobrevivir".

Rodríguez sufrió un accidente por el que quedó con un brazo inmóvil y una pierna "deshecha". Ese fue uno de los motivos que lo alejó del trabajo. Después de "pelearla mucho tiempo" logró cobrar una pensión por discapacidad. Con ese dinero y con lo que saca por día por cuidar coches compra comida, y si le sobra, vino. El frío lo enfrenta armando "un fueguito". "De noche pongo unos cartones. Se acuesta Manchita, la abrigo y al lado me acuesto yo con las otras mantas que tengo. Perdé cuidado que frío no paso", afirma.

Dice que ha visto de todo en su vida, que aprendió más de la calle que de los libros que leyó en el colegio de monjas y que "se apiada" de la juventud "perdida" por la droga.

"Es difícil para una persona como yo, que siempre trabajó, tener esta vida de bichicome. Yo soy una humanidad perdida, pero ya viví. Lo que no puedo entender es esa juventud perdida. Niños en la calle, mujeres. Me apiado de ellos", dice y señala a la vereda de enfrente, donde vive Cristina (18) -que está embarazada de ocho meses- y su familia, en la cual hay tres niños de 6, 7 y 10 años.

Ayer los chicos iban a ser trasladados, por el INAU, a un hogar. Los mayores se niegan a ir a un refugio porque hay "más mugre", "más droga" y "te roban todo".

"Dormís calentito pero a las siete de la mañana te tenés que ir. Además dejás tu lugar en la calle y al otro día volvés y ya hay otra gente", comentó Cristina. Y agregó: "ahora que salimos en la televisión vino pila de gente a darnos cosas. Tenemos abundante comida. También vino el dueño de Saman a ofrecerle trabajo a mi pareja".

Sarmiento: Puente que cubre de la lluvia y el frío a una familia, un hombre y su perra.

El País Digital

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